Medida de la presión arterial 

Aunque la medida de la  presión arterial es hoy día una exploración rutinaria, siguen siendo los resultados de la misma los que permiten diagnosticar la hipertensión. Su correcta determinación reviste, por tanto, gran importancia ya que una sobrestimación de la misma puede inducir a un diagnóstico erróneo en un enfermo sano con la probable aplicación de un tratamiento innecesario.

La medida de la presión arterial deberá ser, por tanto, realizada con un equipo adecuado que garantice su exactitud y reproducibilidad tanto individual como interindividual.

Técnica

La técnica utilizada para la determinación de la presión arterial se basa en la interrupción del flujo de sangre de la arteria braquial mediante la aplicación de una presión uniforme con un manguito inflable. Cuando la presión aplicada es mayor que la presión arterial, el vaso se colapsa y el flujo se detiene no auscultándose ningún ruido.

Al ir diminuyendo la presión del manguito, el flujo en el vaso se restaura originando unos ruidos característicos del flujo turbulento que progresivamente pasa a flujo laminar y que permiten el cálculo de las presiones arteriales diastólica y sistólica.

Los ruidos que permiten dichos cálculos se conocen como fases de Korotkoff:

  • Fase I: Indica que la presión del vaso ha sobrepasado la presión externa. Es un sonido abrupto, alto y progresivamente intenso.
  • Fase II: El sonido es más claro, intenso y prolongado.
  • Fase III: el sonido continua alto y claro aunque empieza a percibirse un murmullo que indica su próxima desaparición
  • Fase IV: hay un pérdida brusca de la intensidad del sonido que se hace marcadamente apagado con un murmullo continuo. En ocasiones es lo último que se escucha
  • Fase V: Desaparición total del sonido al restablecerse el flujo laminar.

Para la correcta medida de la presión arterial se deberán tomar las siguientes precauciones:

  • El manguito inflable deberá ser de las dimensiones adecuadas para rodear el perimetro del brazo exactamente. Existen multitud de "tallas" de manguitos de tal forma que puede elegirse el más apropiado para cada enfermo. Incluso existen manguitos de un solo uso para ser usado en enfermos infecciosos. El estetoscopio se colocará en la parte inferior.
  • El manguito será inflado rápidamente hasta que su presión sobrepase la PAS estimada, lo que se puede comprobar por la desaparición del pulso radial.
  • Desde este nivel de presión se comienza a desinflar el manguito de forma lenta y progresiva.
  • Cuando la presión arterial y la del manguito se igualan, en cada sístole la presión es capaz de superar ligeramente la presión externa. Esto se traduce en la aparición del pulso y de un sonido intenso que acompaña cada onda de pulso.
  • A medida que se desinfla el manguito van apareciendo las distintas fases de Korotkoff hasta desaparecer en la fase V.

Factores que influyen

Para que las medidas de la presión arterial sean reproducibles por otro observador, es necesario estandarizar el procedimiento, teniendo en cuenta los factores que influyen:

  • Ambiente: el local donde se realice la medida deberá ser lo más tranquilo posible, sin ruidos y con una temperatura e iluminación agradables.
  • Paciente: el paciente deberá permanecer en reposo durante 5 minutos antes de efectuar la medida de la presión, sentado confortablemente en un sillón adecuado con el brazo a explorar relajado y apoyado, con la palma hacia arriba. El brazo debe estar descubierto.
  • Observador: los profesionales que realizan las medidas de la presión arterial deberán tener un entrenamiento similar. Deberán estar familiarizado con el sonido del estetoscopio y tener la capacidad de discriminar sonidos correspondientes a las fases de Korotkoff. En particular, los ruidos de las fases IV y V deben ser perfectamente discriminados.

Equipos

El equipo preciso para la medida de la presión arterial está constituído por el estetoscopio, el esfingomanómetro y el manguito.

  • Estetoscopio: los sonidos arteriales son bien transmitidos y serán bien percibidos si se coloca sobre la arteria humeral, en el pliegue del codo.

  • Esfigomanómetro: puede ser de mercurio, aneroide u oscilométrico.

    • de mercurio: consiste en un cubeta que contiene mercurio conectada a un tubo vertical de cristal con un extremo abierto por donde sube el mercurio al inflar el manguito. El tubo está calibrado entre 0 y 300 mm . El sistema va conectado mediante un tubo de goma al mecanismo de inflado que consiste en una pera y una válvula que regula el paso del aire hacia el sistema o hacia el exterior. Deberá estar en posición vertical sobre una mesa horizontal o mejor aún colgado de una pared.
    • aneroide: se trata de un mecanismo a resorte que se moviliza a una presión determinada y de forma proporcional a la misma, desplazando una aguja en una esfera graduada en mm de Hg. Aunque vienen calibrados de fábrica, son sensibles a la temperatura y humedad y se deben recalibrar cada 6 meses
    • oscilométrico: es un aparato electrónico basado en el análisis de la onda de pulso. Algunos equipos que llevan este tipo de esfingomanómetro pueden ser muy sofisticados, siendo programables y permitiendo el inflado automático del manguito. Incluso algunos se han desarrollado como periféricos para conectar a un PC. En los más sencillos y baratos, el inflado es manual. La fiabilidad de estos aparatos ha sido bien establecida, lo que los hace ideales para la toma domiciliaria de la PA.

       
  • Manguito:

    El maguito consta de una cámara de caucho infable situada en el interior de una funda de tela que la engloba y que permite un abombamiento en su parte interna. Las dimensiones del mismo son críticas, ya que un brazal demasiado ancho dará valores anormalmente bajos de la PA, mientras que uno demasiado estrecho dará valores más altos.

Bibliografia: http://www.iqb.es/cardio/htahtm/cap2/hta2_1.htm