El cáncer oral es el sexto cáncer más común en el mundo
y ha tenido una morbilidad muy alta y una pobre supervivencia de los
pacientes afectados; y esto no ha cambiado en las últimas décadas. Más
allá de la prevención, el descubrimiento temprano es lo más crucial y
determinante para el tratamiento exitoso y supervivencia al cáncer oral.
Todavía las metodologías actuales para diagnóstico de cáncer basado en el
examen patológico son insuficientes para descubrir las fases tempranas de
esta neoplasia.
Para esta necesidad clínica de diagnóstico precoz se ha desarrollado
un sensor basado en biomarcadores del cáncer oral, como es el
receptor de factor de crecimiento epidérmico (EGFR) de quien la encima de
expresión es asociada con lesiones tempranas de cáncer oral y
fenotipos de cáncer agresivos.
El análisis comienza cepillando suavemente una lesión en la boca que
es sospechosa de ser cancerígena para obtener algunas células que se
sumergen en un fluido. La mezcla se introduce en una especie de cajetilla
que la transporta hacia una cavidad porosa, a modo de tamiz. Allí esperan
unos anticuerpos teñidos de fluorescencia y programados para unirse al
EGFR, de manera que el programa puede leer automáticamente cuánta cantidad
de esta proteína hay en la muestra y por tanto, si existe o no un
carcinoma oral.
El sistema demostró en diez minutos un grado significativo de
sensibilidad (p <0.05) para la detección temprana del cáncer oral
en relación con las células control con la expresión de EGFR similar
al epitelio escamoso normal.
Los resultados obtenidos con este sistema sensor comparados con la
citometría de flujo (el r2 = 0.98), que es la norma de oro en el
análisis de expresión de proteína cuantitativa. El sensor descubrió
diferencias significantivas entre las líneas celulares del cáncer oral
(p <0.01), respondiendo a una disparidad de aproximadamente 34000 EGFR
para dichas células.
Tomado estos resultados demuestran que es un dispositivo de
utilidad para el diagnóstico temprano del carcinoma espinocelular,
mejorando el pronóstico de supervivencia y la calidad de vida, debido a
que no se necesitarían cirugías mutilantes.
Mc Devitt ha señalado que aún tardarán algunos meses en hacer la
transición de las líneas celulares a los pacientes, como apuntan en su
trabajo, tienen una heterogeneidad mucho mayor de células en su saliva. |