ICCMS recomienda que las consultas de
revisión y monitoreo (llamadas comúnmente intervalos de revisión) se
ajusten de acuerdo con la edad del paciente y su estado de riesgo. ICCMS
define intervalo de revisión como la duración del
intervalo personalizado entre consultas para revisar y monitorear el
estadio de caries del paciente. La frecuencia para la revisión puede ser
tan alta como una vez cada tres meses para un niño (menor de 18 años)
con alta probabilidad de desarrollar lesiones de caries o, tan baja como
una vez cada dos años para un adulto con una baja probabilidad de
desarrollar caries. Nótese que la frecuencia que se utilice puede
ajustarse a otras condiciones como la salud periodontal o de las
mucosas. El rango del intervalo de revisión debe reconsiderarse y
modificarse o reutilizarse, de acuerdo con los hallazgos en la revisión
y monitoreo.
ICCMS diferencia entre los intervalos
de revisión establecidos para el manejo general de riesgo, para la
evaluación de intervenciones preventivas y el monitoreo de lesiones
iniciales (para verificar su estado de progresión) y la revisión de los
planes de cambio de comportamiento y de higiene oral.
ICCMS recomienda que en cada consulta
(tanto de tratamiento como de revisión) se lleve a cabo algún grado de
revisión. Es esencial evaluar el progreso del paciente (o la ausencia)
en las modificaciones de comportamiento recomendadas dentro del plan de
manejo de riesgo. Si es necesario, se debe considerar y discutir la
modificación de las metas de comportamiento del paciente. Cuando se
indaga sobre el estado del cambio de comportamiento del paciente también
es importante conservar la autonomía del paciente (el valor que da el
paciente a la salud oral y al tratamiento elegido). Puede ser útil
elaborar un escrito sobre las nuevas metas de modificación del
comportamiento para que el paciente se las lleve a casa. Es importante
mantener una buena documentación de la revisión y registrar metas de
comportamiento futuras.
El "monitoreo" en este contexto es la
evaluación del estado clínico de la dentición (incluyendo tratamiento en
curso) y establecer si las lesiones previamente identificadas han
progresado, se han revertido o se han detenido (inactivas). El monitoreo
puede hacerse en los intervalos de revisión y puede también completarse
en las citas de tratamiento. Todas las superficies/dientes son evaluados
y se comparan con las categorías de caries ICCMS previas. Las
radiografías son interpretadas para evaluar la posible progresión de la
caries. Adicionalmente, las áreas donde se haya realizado sellantes o
restauraciones sin remoción completa de caries, se deberían evaluar con
radiografías coronales/periapicales para determinar el tamaño y la
profundidad de la transición de las lesiones (y cambios apicales si es
adecuado) o, ausencia de ésta. Además deberían tenerse en cuenta todo el
conjunto de métodos de valoración y detección como el registro de los
síntomas del paciente (dolor, inflamación, etc.) y la evaluación clínica
(incluyendo instrumentos para detección y valoración de actividad, si
son apropiados).
El intervalo de revisión se basa en
la edad (patrón de erupción y otras consideraciones) y el riesgo (a
nivel de la lesión y del paciente). Hay poca evidencia que soporte un
intervalo de revisión específico para prevenir la caries dental (89).
Además, en una revisión sistemática se encontró que la evidencia que
respalde un intervalo específico (por ejemplo seis meses) aplicable a
todos los individuos es débil (90). Los intervalos de revisión los
acordó un grupo de "Colaboración Global para Manejo de
Caries" y están respaldados por un gran número de intervalos
recomendados que están publicados (68,70,91,94) (Nota: el nivel 1++ es
el mayor nivel de evidencia en estas seis referencias citadas). En la
cita de revisión se llevan a cabo tanto la revisión como el monitoreo.